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SERVICIOS DE OUTSOURCING: ¿CUÁL ES EL MEJOR PARA SU NEGOCIO?
La subcontratación no se reconoció formalmente como una estrategia comercial hasta 1989, pero las empresas ya habían externalizado servicios auxiliares a proveedores externos incluso antes. Con la industrialización provocando la especialización de los servicios y un aumento de la demanda de tales, la subcontratación se ha convertido en la solución.

Lo que se considera una ventaja es la gran cantidad de servicios de externalización que las empresas pueden optar por subcontratar. Hay varios tipos de servicios de outsourcing, según la tarea o el servicio proporcionado, la ubicación y la relación involucrada.

Según la tarea o servicio prestado:
1. Outsourcing profesional / especialista
Piense en las tareas no esenciales (no esenciales o que no forman parte de los objetivos centrales de su empresa), pero las tareas necesarias que hacen que su empresa funcione como finanzas y contabilidad, tecnología de la información (TI), asistencia administrativa, recursos legales y humanos, entre otras cosas.

Estas son tareas que no forman parte de sus objetivos comerciales, pero requieren expertos en sus respectivos campos. Estos tipos suelen ser los más comúnmente subcontratados, ya que existen ahorros máximos con la prestación de servicios de mayor valor.

Cuando contrata servicios profesionales, solo paga por los servicios o las habilidades de expertos que se proporcionan sin invertir necesariamente en capacitación o equipo, y aún así tiene acceso a recursos de alta calidad, tanto en personal como en infraestructura.

Un ejemplo perfecto de esto es la externalización de TI. Hoy en día, casi todos los tipos de negocios tienen que ver con la tecnología, y es una estrategia comercial si una empresa subcontrata su administración de TI porque es menos costosa que construir su equipo interno.

Una empresa puede externalizar todas sus necesidades de almacenamiento de datos porque no puede permitirse o simplemente no quiere comprar y mantener su infraestructura de almacenamiento de datos, lo que se puede ver en el almacenamiento en la nube.

La subcontratación profesional se ha convertido en algo muy común en la mayoría de las empresas con múltiples fuentes. El abastecimiento múltiple implica la contratación de los mejores especialistas para llevar a cabo operaciones comerciales para finanzas y contabilidad, gestión de datos, TI, etc.

2. Externalización del fabricante
Este tipo de subcontratación ha sido muy común desde entonces entre los fabricantes de productos, ya que implica principalmente la externalización de trabajos manuales a un proveedor externo.

La mayoría de las pequeñas y medianas empresas de hoy sobreviven gracias a este tipo de subcontratación. Debido al mercado competitivo, existe la necesidad de ofrecer productos de alta calidad a un precio más económico.

Sin este tipo de subcontratación, estas empresas carecen de las economías de escala que les permiten competir con los gigantes de la industria, ya que no todas pueden invertir y actualizar continuamente los equipos, el personal y la tecnología de procesos que son necesarios para competir en un mercado.

3. Proceso específico o externalización operativa.
A diferencia de la contratación externa profesional o especializada, donde es específica para el talento o el personal, esto es específico para las operaciones. Las compañías optan por externalizar aspectos relacionados con operaciones específicas a otras compañías o unidades que se especializan en ese servicio en particular.

Por ejemplo, las empresas minoristas optan por externalizar el envío y la entrega a las empresas de mensajería. Las empresas optan por externalizar el mantenimiento de sus equipos con aquellos que se especializan en tales servicios.

Al igual que la subcontratación especializada, esto permite a las empresas centrarse en su negocio principal y mejorar la prestación de servicios al tiempo que reduce los costos y ahorra tiempo.

Según la ubicación:
1. Outsourcing Offshore
Esta práctica de subcontratación significa subcontratar a otro país y ha crecido durante el crecimiento de Internet y las telecomunicaciones en los años noventa.

A diferencia de antes, donde esto se ve como una forma de reducir simplemente los costos de operación, ahora se considera una forma estratégica de ingresar a nuevos mercados y aprovechar el talento no disponible en el país.

2. reorganización
Cuando la crisis económica golpeó a los EE. UU. Después del ataque del 11 de septiembre, la mayoría de las compañías decidieron subcontratar las operaciones en el extranjero solo para mantener sus negocios a flote.

A medida que la economía mejoraba, las compañías con sede en Estados Unidos comenzaron a llevar más de sus operaciones a casa. Esta tecnología se conoce como reafirmación, que es la transferencia de una operación comercial a su país de origen.

3. Nearshoring
Esta externalización basada en la ubicación combina los beneficios que ofrecen la deslocalización y la reafirmación. Permite a las empresas establecer estrategias, lo que les permite mantener las operaciones “cerca” de la ubicación, pero aún así ahorra dinero y mejora la prestación de servicios.

Nearshoring es simplemente trasladar las funciones comerciales a un país geográficamente más cerca de una zona horaria o estructura económica más cercana al país de origen de la empresa.

Según la relación de outsourcing:
HfS Research describe tres tipos de relaciones de subcontratación en su libro blanco, “The Great Talent Paradox in Outsourcing”.

1. Outsourcing “Lights On”
HfS Research define esta relación con un comprador que busca simplemente eliminar el costo sin incurrir en ningún “desastre”. Este comprador está satisfecho de que sus servicios se realicen a un costo más barato y sin valor agregado, siempre y cuando los objetivos establecidos en la forma de SLAs (acuerdo de nivel de servicio) se cumplen.

2. Outsourcing “eficiente”
Esta relación tiene un comprador que reconoce el desarrollo de un plan de gestión para facilitar la mejora continua, así como aumentos de eficiencia que entregan más valor estratégico.

Este tipo de relación tiene empresas o compradores dispuestos a invertir en habilidades especializadas, pero no están dispuestos a invertir en mejorar sus talentos (o capacitarlos más).

3. Externalización “estratégica”
Esta categoría de relación hace que el comprador reconozca que el trabajo de subcontratación simplemente para reducir los costos iniciales es una medida a corto plazo, que no producirá ahorros a largo plazo sin los intercambios de personal en el extranjero y las inversiones de mejora de procesos.

Estos tipos de compradores toman la decisión de subcontratar en función de los objetivos de sus empresas e incluso ven al proveedor de outsourcing como un socio con el que colaborar para mejorar los resultados comerciales. Ven el valor que sus socios de outsourcing proporcionan y desarrollan sus talentos de acuerdo con las métricas evaluadas, lo que les ayudará a avanzar a medida que los objetivos del proyecto cambien dentro del negocio.

¿Qué tipo de outsourcing es mejor para su negocio?
Independientemente del tipo de tarea o servicio que uno elija para subcontratar y la ubicación a la que subcontrata, siempre debe apuntar a una relación estratégica con el proveedor de subcontratación.

No subcontrate solo para reducir los costos de las operaciones, debe considerar sus objetivos comerciales, identificar las áreas en las que necesita ayuda especializada, analizar si es más fácil mantener un equipo interno o subcontratar, y luego decidir.

Cuando decida subcontratar, busque un socio que no solo preste servicios de acuerdo con objetivos establecidos, sino que también aporte valor a su negocio. Ahí es cuando sabes que tienes el mejor socio de outsourcing.

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